
El fortalecimiento de la educación pública se articula a la rectoría del Estado mexicano en materia educativa. Entre los diferentes pronunciamientos de Sheinbaum encontramos el peso que le otorga. Durante su candidatura por la coalición Sigamos haciendo historia afirmó en el tercer debate presidencial que la educación es un derecho y no un privilegio o una mercancía (Canal Once, 2024, 1540). Valdría la pena recordar que, independientemente del origen del financiamiento, la educación siempre tendrá una función pública. De esta manera, las escuelas y universidades con financiamiento privado son un espacio de lo público, por eso valdría la pena preguntarse, frente a una científica, cuál es su postura sobre estos centros educativos.
Otro punto nodal se refiere a la continuidad de las políticas de equidad, entre ellas las becas en todos los niveles educativos, enfatizando la atención a los jóvenes de educación media superior y superior, dado que el primero es el nivel educativo de mayor exclusión y deserción escolar en el país ya que, según el INEGI, sólo 45.3% de jóvenes de 15 a 24 años asiste a la escuela (INEGI, 2022). En este punto, se considera la apertura de universidades, tal como lo hiciera en su gobierno de la Ciudad de México con la Universidad Rosario Castellanos y la Universidad de la Salud. Frente a estas realidades, Sheinbaum Pardo dijo haber aumentado las becas para los jóvenes de media superior y superior con la finalidad, entre otras cosas, de mantener a los jóvenes en las aulas y no en las calles (Canal Once, 2024, 2040). Estas instituciones han dado oportunidad de estudio gratuito a más de 50 mil jóvenes en la Ciudad de México.
Otra continuidad en materia educativa son los Centros llamados Pilares que, si bien se perfilaron para ofrecer diversas acciones para jóvenes con mayores rezagos educativos, también cuentan con diversos talleres en los que se capacita a adultos. El proyecto de Pilares es de carácter educativo y sociocultural; ahí sus estudiantes reciben orientación y ejercen su derecho a la educación, al deporte, obtienen capacitación para el empleo y autonomía económica por medio de talleres, ciberescuela, bachillerato en línea y cursos para los exámenes de admisión de la UNAM y el IPN (Servicios escolares, s/f).
La presidenta Sheinbaum enfrenta grandes retos en materia educativa. Uno de ellos, si no es que el más relevante, es el aseguramiento de la calidad o, como decía Pablo Latapí, la buena educación. En el centro de esta discusión se ha señalado tanto a las Universidades Benito Juárez como a la fundamentación y el modelo curricular de la Nueva Escuela Mexicana. A este respecto, durante su campaña expuso la necesidad de la continuidad del modelo educativo de la Nueva Escuela Mexicana con los nuevos libros de texto, donde se busca que los estudiantes no basen sus conocimientos en la memorización, sino en sus contextos y regiones, y que fue construido con la participación de maestras y maestros (Canal Once, 2024, 3307). Sin embargo, persisten algunas cuestiones como, ¿cuáles son los saberes y aprendizajes curriculares y sociales que se han de fortalecer?, ¿hacia dónde hay que orientar el programa La Escuela es Nuestra?, ¿cómo lidiará con la herencia educativa y los pendientes de López Obrador?
Entre los sujetos olvidados aparece la población joven y adulta mayor de 15 años que se encuentra en situación de rezago educativo, con 10.4% hasta 2015 (INEGI, 2022), la educación con población migrante y la formación y recuperación de los saberes pedagógicos de los docentes. Las Escuelas de Tiempo Completo dejaron de funcionar en casi todo el país, pero bajo el mandato de Sheinbaum en la Ciudad de México, 500 escuelas bajo este esquema siguieron funcionando (García, 2022). Este punto requiere de especial atención a lo largo y ancho del país.
Por último, pero no menos importante, se encuentra el reto de ofrecer una buena educación a la población que vive las brechas de mayor desigualdad educativa y tecnológica, como la de los pueblos originarios, la educación rural, entre ellas las escuelas unitarias y multigrado.
A 100 años de la creación de la Secretaría de Educación Pública, la visión de una mujer al frente del país invita a imaginar una deconstrucción de nuestro Sistema Educativo Nacional, con agentes que tengan la capacidad de movilizar acciones y programas educativos para dar cumplimiento al derecho a la educación.