
Uno de los principales hallazgos es la disminución del 6.5% en la producción petrolera de Pemex en 2024, en comparación con el año anterior. Este descenso se destaca como un aspecto relevante dentro del análisis de los resultados operativos de la empresa, que ha visto una tendencia a la baja en la producción de crudo en los últimos años.
En cuanto a los resultados financieros, Pemex registró su mayor nivel de deuda con proveedores en los últimos 13 años, lo que refleja un desafío en la gestión de sus obligaciones financieras. La deuda con proveedores es un indicador clave en el análisis financiero de la empresa, ya que afecta su liquidez y capacidad de operación.
Sin embargo, en el área operativa, la elaboración de petrolíferos alcanzó su nivel más alto desde 2016, lo que señala una mejora en la producción de estos productos, a pesar de los retos en la producción de crudo.
Este análisis se divide en cuatro secciones principales: indicadores financieros, operativos, otros indicadores y los apoyos del Gobierno federal a Pemex.