
El proyecto impulsará, además, las cadenas logísticas e integrará los modos de transporte carretero, ferroviario y marítimo, de acuerdo con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
Para realizar los estudios de preinversión para la formulación de este Sistema, la SICT solicitó a Hacienda 4 millones 116 mil 229 pesos.
El análisis, a cargo de la Agencia Reguladora de Transporte Ferroviario (ARFT), se realizaría entre mayo y octubre.
Uno de los principales problemas es la infraestructura de la red carretera, la cual cuenta con 407 mil 958 kilómetros y no cumple con las condiciones de cobertura y operativas para tener la conectividad eficiente con los diferentes modos de transporte.
En el documento detalla que otros de los problemas de la logística en México son los derechos de paso y de arrastre, así como el intercambio de equipo en el transporte ferroviario, pues las empresas protegen sus zonas de influencia delimitadas por región.
Además, las principales industrias manufactureras concentran sus actividades en el centro del País, por lo que la infraestructura portuaria y costera no ha ido aparejada con el desarrollo industrial costero, el crecimiento del PIB estatal y el incremento de actividad económica en entidades con litoral.
La desarticulación del transporte genera un alza en los costos logísticos entre 14 y 35 por ciento, expone.
Si se compara con otros países de la OCDE, el costo logístico es de 8 por ciento en promedio.
Cabe recordar que el costo logístico es el valor por llevar una cierta mercancía desde el centro de producción hasta el consumidor final.
Actualmente, México no tiene suficiente infraestructura logística para hacer frente a las nuevas condiciones del T-MEC para los sectores prioritarios, además de contar con altos precios logísticos y bajos niveles de calidad.