
Según José Ramón Silva, secretario de Desarrollo Energético en Tamaulipas, uno de los mayores desafíos para expandir la industria eólica en la región es la falta de infraestructura de transmisión, lo que limita la capacidad de conectar nuevos proyectos a la red eléctrica. El gobierno estatal, en conjunto con el gobierno federal, está trabajando en el fortalecimiento de la red de transmisión y en la construcción de nuevas líneas que permitan la instalación de plantas adicionales para aprovechar el potencial energético del estado.
La Asociación Mexicana de Energía Eólica (AMDEE) también ha expresado la necesidad de que el sector energético abra más oportunidades a la inversión privada, con el objetivo de impulsar el sistema eléctrico nacional y fomentar la seguridad energética. Gerardo Pérez Guerra, presidente de la AMDEE, señaló que tanto el sector público como el privado tienen un papel fundamental en la transición hacia energías renovables, con proyectos de generación por viento que pueden ayudar a diversificar la matriz energética del país.
Se estima que para 2030, el norte de México requerirá alrededor de 11 gigawatts de energía, y el secretario Silva ha enfatizado la importancia de desarrollar infraestructura adicional para satisfacer esta demanda. Con la proyección de nuevas líneas de transmisión en los próximos dos años, Tamaulipas busca ser un pilar en el suministro de energía limpia a nivel regional. También se han anunciado alianzas estratégicas con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) para facilitar el crecimiento de la industria de renovables en el estado, en sintonía con el Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen).