El esquema generaría 104 mil 523 millones en ingresos para el Estado en ese periodo, añadió la Asociación.
Expuso que por proyectos en yacimientos no convencionales se tendrían 54 mil 742 millones de dólares; en aguas someras, 33 mil 721 millones; en campos terrestres, 11 mil 751 millones, y en aguas profundas, 4 mil 310 millones.
Los 56 mil 190 millones de dólares restantes serían derivados de inversiones en contenido nacional, agregó.
Merlin Cochran, director general de la Amexhi, explicó que 52 por ciento de los recursos con potencial petrolero están sin asignar.
"La mayoría (de bloques) lo tiene el Estado y no se hace nada. Si bien es cierto que la industria de hidrocarburos se irá desfasando, por ahora México tiene esos recursos que se pueden utilizar y monetizar para uso social y del Estado.
"Tenemos el nearshoring y tenemos el potencial para detonarlo con gas mexicano", agregó. Dijo que otros países se han beneficiado con este esquema, como Brasil y Argentina.
El primero, de 2019 a la fecha realizó ocho rondas y obtuvo 19 mil millones de dólares, mientras que el segundo con su primera licitación en aguas someras, profundas y ultraprofundas logró 770 millones.
Régulo Salinas, presidente de la Comisión de Energía del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), destacó la importancia de volver a abrir el sector para emitir nuevos permisos.
"Debemos preguntarnos qué nos conviene como País; sabemos que Pemex está limitado y eso no cambiará, entonces o dejamos que el sector privado ya no haga exploración porque ya no hay nuevas rondas o empezamos a abrir ese sector donde el tamaño del 'pastel' es muy grande y alcanza para todos", puntualizó.