La cantidad de contaminación que emite una instalación dedicada a la producción o extracción de recursos no depende únicamente de su ubicación, sector o tipo de actividad. Esto es lo que descubrió nuestro equipo de economistas ambientales y financieros al analizar cómo las características corporativas influyen en las emisiones contaminantes.
Las tasas de emisión también varían según las particularidades de la empresa propietaria de la instalación, como la cantidad de patentes que posee, su rentabilidad y el número de empleados, según un análisis de los datos de contaminación corporativa.
Descubrimos que las instalaciones industriales y mineras propiedad de empresas rentables, con relativamente pocas patentes y menos empleados, tienden a liberar mayores proporciones de sus desechos tóxicos al medio ambiente, ya sea al aire, al agua o al suelo.
En cambio, los sitios industriales pertenecientes a empresas no rentables, con mayores niveles de innovación y más personal, suelen gestionar mejor sus residuos tóxicos mediante procesos responsables con el medio ambiente, como su tratamiento no tóxico, reciclaje o incineración para generación de energía.
Leyes obligan a publicar los datos de contaminación de industrias
Una ley federal de 1986 exige que las compañías de ciertas industrias, que empleen a más de 10 personas y que fabriquen, usen o procesen cantidades significativas de productos químicos tóxicos o peligrosos, informen al gobierno sobre el destino de dichos productos químicos una vez terminan de utilizarlos.
La Agencia de Protección Ambiental de EU (EPA) recopila estos datos en una base llamada Inventario de Emisiones Tóxicas. Esta información incluye detalles sobre las empresas, sus instalaciones, ubicación y cómo manejan sus residuos químicos. El objetivo es no solo informar al público sobre los químicos peligrosos presentes en sus comunidades, sino también incentivar a las empresas a adoptar métodos más limpios y gestionar sus residuos de forma responsable.
En 2023, las empresas estadounidenses reportaron haber liberado al medio ambiente 1,500 millones de kilogramos de sustancias químicas tóxicas, lo que representa una disminución del 21% respecto a 2014. Esta reducción refleja una mejor gestión de residuos, adopción de tecnologías más limpias y medidas de prevención de la contaminación, además de que los requisitos de divulgación motivan a las empresas a disminuir sus emisiones.
Las emisiones de 2023 provinieron de más de 21,600 instalaciones industriales en los 50 estados y varios territorios de EU, incluyendo Puerto Rico, Islas Vírgenes, Guam y Samoa Americana. Una quinta parte de las instalaciones que reportaron emisiones tóxicas se encontraba en Texas, Ohio y California.
¿Qué tipos de empresas liberan contaminación tóxica?
Los sectores más contaminantes en EU son la minería de metales, la fabricación de productos químicos, los metales primarios, el procesamiento de gas natural y los servicios eléctricos. En conjunto, estas industrias representaron el 78% de los químicos tóxicos liberados en 2023.
Investigaciones previas muestran que los niveles más altos de emisiones suelen provenir de instalaciones ubicadas en comunidades menos pobladas, rurales, económicamente desfavorecidas o con mayoría de minorías.
No obstante, la geografía y la demografía no explican por completo las diferencias en las emisiones. Incluso dentro de la misma zona, algunas instalaciones contaminan menos que otras. Nuestra investigación reveló que las características corporativas como tamaño operativo, capacidad de innovación y solidez financiera son factores clave.
En nuestro análisis, combinamos los datos reportados a la EPA sobre emisiones químicas con información financiera de las empresas y datos geográficos y demográficos por código postal. Descubrimos que características corporativas como la rentabilidad, el número de empleados y el número de patentes están más estrechamente relacionadas con las emisiones que la densidad poblacional, el porcentaje de minorías o los ingresos familiares.
Analizamos qué proporción de sus residuos químicos tóxicos una instalación liberó al medio ambiente en comparación con lo que trató, recicló o incineró.
La instalación promedio de nuestra muestra, que incluyó 1,976 instalaciones de empresas con datos financieros disponibles, liberó alrededor del 39% de sus residuos químicos tóxicos al aire, agua o suelo, mientras que el 61% restante se gestionó mediante reciclaje, tratamiento o recuperación de energía, ya sea en el sitio o fuera de él.
Sin embargo, las tasas de liberación varían según la industria. Por ejemplo:
Minas de carbón: 99 % de los químicos liberados.
Extracción y procesamiento de gas natural: 81%.
Compañías eléctricas generadoras: 25%.
Fabricantes de equipos eléctricos: menos del 3%.
El papel de la innovación
Un atributo corporativo que examinamos fue la innovación, medida por las familias de patentes, que agrupan documentos relacionados con la misma invención, incluso si se presentan en distintos países. Descubrimos que las empresas más innovadoras liberan menos residuos tóxicos al medio ambiente.
En concreto, las instalaciones del 25% superior de empresas en innovación liberaron un promedio del 32.5% de sus residuos, ocho puntos porcentuales menos que el promedio del resto de las instalaciones de la muestra.
Nuestra hipótesis es que la innovación proporciona una ventaja competitiva que permite a las empresas adoptar tecnologías de producción más limpias o invertir en métodos de gestión de residuos más responsables, reduciendo así la contaminación directa.
El tamaño y la rentabilidad también importan Analizamos además el tamaño de las empresas (número de empleados) y su rentabilidad para ver cómo se relacionan con los niveles de contaminación de sus instalaciones. Descubrimos que las empresas más grandes, aquellas con más de 19,000 empleados, poseen instalaciones que liberan un promedio del 31% de sus residuos químicos tóxicos al medio ambiente.
En cambio, las instalaciones de empresas medianas, de entre 1,000 y 19,000 trabajadores, liberan un promedio del 45%. Las de empresas más pequeñas, con menos de 1,000 empleados, liberan un promedio del 42% de sus residuos químicos tóxicos al medio ambiente.
Es importante destacar que las empresas más grandes, que suelen tener varias ubicaciones, suelen poseer instalaciones que manejan mayores volúmenes de sustancias químicas. Por lo tanto, incluso si liberan cantidades menores de sus residuos tóxicos al medio ambiente, estas pueden llegar a representar cantidades mayores.
También descubrimos que las instalaciones industriales propiedad de empresas rentables tienen tasas promedio más altas de liberación de sustancias químicas tóxicas al medio ambiente que aquellas propiedad de empresas no rentables.
Las instalaciones propiedad de empresas con ingresos netos positivos, según sus estados de resultados obtenidos de PitchBook, una empresa que recopila datos sobre corporaciones, liberaron un promedio del 40% de sus residuos con sustancias químicas tóxicas al medio ambiente. Las instalaciones propiedad de empresas con ingresos netos negativos liberaron un promedio del 31% de sus residuos químicos tóxicos al medio ambiente.
En nuestra opinión, esto indica que las empresas con una sólida situación financiera no son necesariamente más responsables con el medio ambiente. Esto podría ser una prueba de que las empresas rentables se lucran, en parte, contaminando el medio ambiente en lugar de financiar la prevención o la limpieza de la contaminación.
Nuestro análisis muestra que la geografía y la demografía por sí solas no explican completamente los diferentes niveles de contaminación de las industrias e instalaciones. Las características corporativas también son factores clave en la gestión y eliminación de los residuos tóxicos.
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation